Información general sobre la enfermedad
Otros nombres
- Congenital HIV
- Congenital human immunodeficiency virus
- HIV
- Neonatal HIV
- Neonatal human immunodeficiency virus
Tipo de enfermedad
Prevalencia al nacimiento
Se calcula que cada año nacen menos de 100 bebés con esta enfermedad en los Estados Unidos.
Resultado del examen
Qué es virus de inmunodeficiencia humana
El virus de inmunodeficiencia humana (VIH) es un virus que ataca el sistema inmunitario del cuerpo. Si el VIH no se trata, puede causar el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA). El VIH se transmite a través del contacto con algunos líquidos corporales o con la sangre de una persona infectada por el virus.
Cuando una madre embarazada tiene una infección por VIH o SIDA, el virus puede infectar al bebé durante el embarazo, el parto o al amamantar. Es más frecuente que el VIH se transmita de la madre al bebé durante el parto (transmisión perinatal). El tratamiento durante el embarazo de una madre infectada por VIH con medicamentos antivíricos puede reducir las probabilidades de que el bebé se contagie.
La mejor manera de prevenir la infección por VIH en los bebés es realizar un examen a todas las mujeres embarazadas para detectar la infección. Eso permite que las mujeres gestantes que están infectadas por VIH puedan recibir medicamentos antivíricos para reducir la cantidad del virus. Aunque unos 5.000 bebés nacen cada año en los Estados Unidos de madres infectadas por VIH, menos de 100 bebés nacen con una infección por VIH al año gracias al uso del examen de recién nacidos y a la terapia antivírica.
Los bebés que se infectan por VIH antes del nacimiento no tendrán problemas de salud de inmediato, pero es frecuente que desarrollen signos y síntomas más tarde en la vida.
Examen de recién nacidos y seguimiento
Los Centros para el Control y la Prevención de las Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan que todas las mujeres embarazadas reciban un examen para detectar el VIH. Las mujeres infectadas por VIH pueden recibir terapia antivírica para prevenir la transmisión del VIH al bebé. Es posible que algunos estados ofrezcan una prueba adicional de la exposición al VIH a través del examen de recién nacidos. El examen de recién nacidos de VIH requiere una pequeña muestra de sangre que se extrae del talón de su bebé. Para obtener más información sobre este proceso, visite la página de la Prueba con muestra de sangre.
El examen mide si la sangre de su bebé contiene anticuerpos de VIH. Los anticuerpos son proteínas especiales que produce el sistema inmunitario como respuesta a una infección. Las mujeres gestantes transmiten anticuerpos a sus bebés.
Si el resultado del examen de anticuerpos de VIH es positivo, el proveedor de atención médica de su bebé se comunicará con usted. Juntos discutirán qué medidas tomar y los planes para el seguimiento.
Un resultado de VIH positivo indica que su bebé posiblemente estuvo expuesto al VIH durante el embarazo o durante el parto. No significa que su bebé tenga infección o que tendrá o desarrollará problemas de salud. Sin embargo, sí significa que su bebé necesita algunas pruebas de seguimiento adicionales.
Su bebé puede necesitar las siguientes pruebas si recibe un resultado de VIH positivo en el examen:
- Análisis de sangre (generalmente repetidos cada dos meses durante el primer año de vida).
Usted deberá completar todas las pruebas de seguimiento recomendadas tan pronto como sea posible. Los bebés con esta enfermedad pueden desarrollar problemas de salud si no se diagnostican y tratan.
Pueden producirse y se producen resultados positivos falsos en el examen de recién nacidos para detectar VIH.
Detalles de la enfermedad
El examen de recién nacidos ayuda a que los bebés tengan una vida más sana. Si su bebé recibe un resultado de VIH positivo, hable lo antes posible con su proveedor de atención médica. Es importante seguir las instrucciones que le proporcione. Puede que su bebé necesite tratamiento, aun cuando no presente signos ni síntomas. En algunos casos, tal vez el proveedor de atención médica de su bebé decida que es mejor observar (monitorear) al bebé antes de tomar otras medidas. La observación cuidadosa y el tratamiento temprano ayudarán a que su bebé se mantenga lo más sano posible.
Los bebés con VIH no tendrán problemas de salud al nacer, pero desarrollarán signos y síntomas, generalmente entre los 4 y los 18 meses y, en ocasiones, unos pocos años después.
Los signos de la enfermedad pueden incluir:
- Crecimiento y aumento de peso deficientes.
- Diarrea.
- Puntos color crema en la boca o la garganta que no mejoran (candidiasis).
- Elevado número de infecciones o infecciones producidas por gérmenes que no afectan a los bebés sanos.
- Ganglios inflamados.
- Múltiples infecciones de oído.
- Sarpullido.
- Hígado o bazo dilatados (hepatomegalia o esplenomegalia).
- Retraso del desarrollo.
Las mujeres gestantes pueden transmitir el VIH al feto o al recién nacido. Una madre con VIH o SIDA puede transmitir el VIH a su bebé durante el embarazo, el parto o mientras está lactando.
El riesgo de transmisión de la madre al bebé es más alto durante el trabajo de parto y el parto, seguido por la lactancia y con menos riesgo durante el embarazo mismo.
El VIH no se hereda a través de los genes de una persona. El riesgo de infección por VIH en los hermanos dependerá de qué tan controlada esté la infección por VIH en la madre durante los embarazos.
Hay muchas formas de reducir el riesgo de que su bebé se pueda infectar por VIH:
- Seguir una terapia antirretroviral (ART) durante y después del embarazo para evitar que el virus se multiplique.
- Hablar con su proveedor de atención médica sobre si es más seguro tener un parto por cesárea.
- Alimentar a su bebé con preparado (fórmula) o leche de pecho donada en lugar de amamantarlo.
- No masticar la comida de su bebé antes de dársela.
Tratamiento y manejo
Los bebés que nacen de madres infectadas por VIH recibirán un ciclo corto de medicamentos antivíricos para ayudar a prevenir la infección (profilaxis). Los bebés con una infección por VIH recibirán tratamiento de inmediato con medicamentos antivíricos adicionales. Es importante que hable con su proveedor de atención médica sobre cuáles pueden ser los mejores tratamientos para su bebé. El objetivo del tratamiento es prevenir algunos de los problemas de salud que causa esta enfermedad.
Las opciones de tratamientos pueden incluir:
- Fármacos para el VIH (zidovudina y otros).
- Antibióticos para ayudar a prevenir las infecciones.
- Modificación del calendario habitual de vacunación en niños inmunodeprimidos graves.